El salvapantallas


El denominado salvapantallas y su uso hoy en día no tiene una clara justificación, se creó hace muchos años cuando los monitores tenían tecnología CRT, es decir, eran de rayos catódicos o tubos y si presentaban una imagen estática sin movimiento durante horas podrían acabar quemando la pantalla dejando esa imagen estática estampada en el monitor de forma apreciable incluso con el monitor apagado.

La opción de apagar la pantalla no era la más cómoda ya que eran monitores que tras encenderlos podía tardar 20 o 30 segundos en dar imagen en pantalla, por lo que no resultaba cómodo apagarlos.

Por supuesto el salvapantallas también hacía la función de seguridad implícita a ocultar los datos que el usuario pueda haber dejado sin querer visibles en la pantalla.

Todos estos problemas relacionados con aquellos antiguos monitores ya no suceden en los monitores TFT actuales, así que la mejor opción en periodos de inactividad es la de apagar la pantalla digitalmente y volverla encender tras pulsar una tecla o mover el ratón.

Sin embargo, los salvapantallas de Apple tienen una estética muy bonita y son relajantes, así que se siguen utilizando en macOS.